PUEBLOS DE FRONTERA


OLIVENZA.- Olivenza, fundación de la orden del Temple en el siglo Xiii, ha alternado durante siglos el ser posesión hispana o portuguesa. Su caserío, entre murallas defensivas, guarda un magnifico patrimonio civil, militar y religiosos, con los más bellos estilos españoles y portugueses. El castillo dispone de una soberbia torre del Homenaje del siglo XV. Aun se conservan algunas de las antiguas puertas de las murallas. La iglesia de Santa Maria del Castillo, de los siglos XVI y XVII, es clasicista, y la de la Magdalena, del siglo XVI, de estilo manuelino, al igual que el palacio de los Duques de Cadaval, actual Ayuntamiento. Debe verse el Museo Etnográfico Municipal González Santana y la capilla de la Casa de la Misericordia, con azulejería portuguesa. A 10 kilómetros se encuentra el puente de Ajuda sobre el río Guadiana, derrumbado desde hace siglos y testigo de antañonas disputas fronterizas. Sus fiestas principales son: la procesión de Nuestro Padre Jesús de los Pasos (quinto domingo de cuaresma), Besa pie de Nuestro Padre Jesús de los Pasos (primer viernes de marzo). Muñecas de San Juan (24 de junio).

ALCONCHEL.- En Alconchel, a 20 kilómetros por la EX-107, destaca su majestuoso castillo de Miraflores, de origen árabe. El caserío lo guarda el templo de Nuestra Señora de los Remedios, de estilo gótico renacentista. Al oeste baja el Guadiana, frontera natural con Portugal, formando una buena parte de la Raya en este suroeste extremeño. Tenemos una actividades de interés que son que en Táliga, a 6 kilómetros de Alconchel, la casa rural Finca Pallarés ofrece rutas en todoterreno a sus huéspedes, esta situada en la carretera de Barcarrota a Villanueva del Fresno, km. 15.

VILLANUEVA DEL FRESNO.- Desde Villanueva del Fresno, paso fronterizo durante siglos entre Portugal y España se puede acceder a las localidades alentejanas de Mourao, a 19 kilómetros o a la bella y amurallada Moncaraz, a 25 kilómetros. Villanueva, fundación medieval del Temple del siglo XIII, reúne en su atractiva plaza Mayor la blanca y neoclásica iglesia de la Inmaculada Concepción, del siglo XVIII, la ermita del Cristo de la Expiración y la Casa Consistorial.

JEREZ DE LOS CABALLEROS.- Su fortaleza habla de una época medieval donde el Temple fijo aquí una de sus sedes más importantes. La torre Sangrienta recuerda el trágico fin de los últimos templarios que se resistieron a abandonar estas posesiones y cederlas a la orden de Santiago. Las torres barrocas de San Bartolomé, con una fastuosa policromía, San Miguel, Santa Maria de la Encarnación y Santa Catalina, dan a esta localidad una atractiva estampa. En mayo, Jerez celebra el Salón del Jamón Ibérico, y la Semana Santa está declarada fiesta de interés turístico regional. Obligada es la visita, a 6 kilómetros por la carretera hacia Burguillos del Cerro, al dolmen del Toriñuelo, monumento nacional. La ubicación se encuentra bien señalada en el margen izquierdo de la carretera, a unos 100 metros del cruce de ésta con el poblado de Valuengo. Su Semana Santa es la más importante de Badajoz. Los momentos más emocionantes son la "madrugá" del Viernes Santo, con saeteros que cantan a la Macarena. Al resucitado del domingo lo llaman Tarzán por su complexión atlética, pero es lunes cuando salen en procesión los "empalados". Van vestidos con enaguas negras, una tela del mismo color cubriéndoles el rostro, corona de espinas, madero sobre los hombros, tres espadas, grilletes en los pies descalzos y 6 metros de soga amarrados al torso desnudo. Tras ellos, los costaleros portan una imagen del Cristo del Perdón y no descansan ni una sola vez durante el trayecto. El mejor lugar para contemplar la procesión es frente al convento de Gracia, donde los empalados se arrodillan hasta que entra el Santo Cristo, en señal de agradecimiento por haberles ayudado a terminar el recorrido.

FREGENAL DE LA SIERRA.- Por la N-435, en 24 kilómetros, se llega a Fregenal de la Sierra, la Acinus fenicia o la Nertobriga de la época celtica. De su patrimonio destaca el conjunto formado por la iglesia de Santa Maria del Castillo, del siglo XV, y la fortaleza de época templaría, edificada sobre una anterior alcazaba árabe. La plaza de toros se sitúa en plena plaza de Armas de la fortaleza y la plaza de Abastos es igualmente contigua. En las afueras, en la ermita de la Virgen de los Remedios, patrona de Fregenal de la Sierra, miles de gitanos realizan una romería a finales de octubre. También aquí se celebran las fiestas patronales (semana siguiente a Semana Santa).

ZAFRA.- A 18 kilómetros por la N-630 se llega al desvío hacia Zafra. En 1394 pasó al señorío de Feria, perteneciente a los Gómez Suárez de Figueroa, cuyo segundo titular, Lorenzo Suárez de Figueroa, mandó construir en 1437 uno de los edificios emblemáticos de la ciudad: el Alcázar, actual parador. También amuralló la población en 1428, fundo el hospital de Santiago, con una magnifica fachada de estilo gótico y termino las obras del convento de Santa Clara. De época medieval es su feria de San Miguel, concedida por Juan I de Castilla en 1380 y ampliada a perpetuidad por Felipe V. El convento de Santa Catalina tiene un magnifico artesonado mudéjar del siglo XVI. Ya en este siglo se daban celebraciones taurinas en la plaza Grande, y en la plaza Chica se ubicaban comercios, posadas y fondas; aquí se encuentra también el palacio de Justicia, del siglo XVI. La iglesia de la Candelaria es de mitad del siglo XVI, con un admirable altar mayor y el llamado Retablo de Zurbaran. El templo cuenta con un museo de objetos religiosos de gran interés. Merecen atención, por ultimo, la Casa Consistorial, el convento del Rosario y el de Santa Clara.