VALLE DEL JERTE EN AUTOMÓVIL 2
Piornal ( Ayuntamiento 927 47 60
10), es la próxima etapa en nuestra ruta. Salimos de Barrado por la
CC-V-134 y nos incorporamos inmediatamente a la CC-V-141, de la que
saldremos por la CC-V-17.5, que nos llevará directamente a esta
localidad serrana. El trayecto habrá sido de unos Volviendo sobre nuestros pasos, es decir,
partiendo de nuevo por la CC-V-17.5, en dirección norte, llegaremos,
tras recorrer 7,5 kilómetros, hasta la localidad de Valdeastillas (
Ayuntamiento 927 47 60 66). Al igual que Piornal, Valdastillas se erige
en un excelente mirador sobre el tramo medio de la cuenca del río
Jerte. Dentro del pueblo disfrutaremos de nuevo de la arquitectura
entramada y edificaciones que lucen en tono rojizo del adobe y el ocre
de las maderas utilizadas en su construcción. Valdastillas es el punto
ideal para el inicio de un itinerario geoambiental por la garganta del
Bonal, que constituye un ejemplo de garganta de paredes abruptas
generadas por el encajonamiento reciente de la red fluvial actual y que
cuenta con un salto de más de veinte metros que hará la visita
inolvidable. La siguiente etapa lleva hasta Rebollar ( Ayuntamiento 927 47 10 62), localidad situada en una empinada ladera de la margen derecha del valle del Jerte. Se sale de Valdastillas por la CC-V-17.5 para llegar hasta la N-110, que se recorre en dirección a Plasencia hasta encontrar el desvío a la CC-V-133, que lleva directamente a Rebollar. El recorrido total no sobrepasa los siete kilómetros. El urbanismo de Rebollar destaca y sorprende por sus estrechísimos callejones de tortuoso recorrido. Rebollar equivale a un autentico museo vivo de arquitectura popular. Algunas de sus viviendas, las dos casas del Canchal, se alzan sobre imponentes moles de granito, produciendo una profunda impresión. Las casas tiene huertos caseros ubicados de milagrosa manera, donde crecen limoneros, naranjos, granados, parrales e higueras. Tiene una humilde construcción eclesial del siglo XVII, la dedicada a Santa Catalina, que ha sido recientemente reformada. Bajando desde Rebollar por la CC-V-133
hasta la N-110 y recorriendo unos 7,5 kilómetros en dirección a El
Barco de Ávila se llega a Navaconcejo ( Ayuntamiento 927 17 31 78). A
partir de este momento la ruta ya no se desvía de la arteria que supone
la N-110. Navaconcejo, villa ribereña del Jerte, está enclavada en
medio de la cuenca. Su origen proviene de la creación de un concejo
medieval, Nava del Concejo. en el siglo XV la población se vio
aumentada por los habitantes de Peñahorcada, localidad que fue
destruida por una crecida del río Jerte. Su urbanismo responde a la
estructura de pueblo-calle, aunque en la actualidad la carretera
principal, la N-110, actúa como su arteria principal, en la que se
ubican la mayoría de ofertas de diversión y residencia. En su
arquitectura destaca la fábrica de Sayales, una construcción fechada
en 1625 con arcadas clásicas y que en la actualidad alberga la Casa de
Cultura. En Navaconcejo A no más de tres kilómetros de
Navaconcejo, siguiendo por la N-110, se llega al pueblo de Cabezuela del
Valle ( Ayuntamiento 927 47 24 10), próxima parada de nuestra ruta, que
se encuentra ubicado en la parte central del valle. Su casco histórico,
declarado conjunto histórico-artístico, rompe con la estructura lineal
del resto de las villas de la zona para presentar una forma urbanística
triangular. Su urbanismo fue desarrollado de forma vertical, ya que se
asentamiento original se ubica en la cúspide de un suave cerro en
tiempos del medievo, formando un núcleo poblacional que se denominó La
Aldea. Sus calles empinadas, laberínticas, y sus callejones sombríos
evocan su diseño medieval. Su plaza principal ostenta unos preciosos y
profundos soportales en donde se celebran cada viernes animados
mercadillos. Es muy recomendable visitar Cabezuela del Valle para las
fiestas de Nuestra Señora de Peñas Albas, que se celebran el 25 de
marzo, y en las que destaca la quema del Judas: un monigote relleno de
paja, pólvora y petardos es paseado por todo el pueblo antes de
prenderle Para llegar a Jerte ( Ayuntamiento 927 47 00 03) desde Cabezuela del Valle se recorren los seis kilómetros que los separan por la N-110 en dirección norte. Jerte está situada en el curso del valle de su nombre. Los prados y campos de cerezos y las huertas se extienden por las escarpadas laderas de las sierras de Tomantos y Candelario. Esta localidad se organiza urbanisticamente a través de dos largas calles, Coronel Golfín y la propia carretera nacional. En la calle Ramón de Cepeda se ven edificios notables con nobles sillares, arcos de medio punto y escudo con orla, y algún que otro dintel donde se inscriben sus fechas de construcción en el siglo XVIII. Su monumento más representativo es su iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, un edificio de mampostería con refuerzos de sillería en esquinas y soportales. La mayor parte fue construida en el siglo XVIII, aunque cuenta con elementos anteriores a esa fecha. Desde Jerte, la ruta apunta hacia Tornavacas ( Ayuntamiento 927 47 01 18), a unos ocho kilómetros de distancia y punto final de la ruta. Para acceder a esta población se abandona la N-110, eje principal del recorrido. Encajonada entre sierras, en la cabecera del valle del Jerte, Tornavacas ha estado siempre marcada por su condición de localidad fronteriza con Castilla. No en vano es paso obligado para la ganadería trashumante de la vecina provincia de Ávila, y por ello se ha abierto en esta localidad un centro de interpretación de la trashumancia que hace homenaje a esta actividad pastoril. Su arquitectura popular se distingue por el predominio de viviendas entramadas, si bien abundan los edificios levantados exclusivamente con piedras. La iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, de estilo barroco, es su principal construcción religiosa. |