SIERRA DE GUIVIJO Y PARQUE DE VALDEREJO 1
Los primeros meses de la primavera
son la mejor época para recorrer la ruta de la sierra de Guivijo que en
su último tramo se completa con una incursión por la sierra de Arcena y
el parque natural de Valderejo. Y lo digo porque lo realmente atractivo
desde el punto de vista paisajístico es ver con vida los ríos, arroyos y
cascadas que dan colorido y alegría a esta parte del País Vasco,
próxima a Castilla. La mejor vía de acceso para contemplar los primeros
perfiles de la ruta es la A-68 (Bilbao-Zaragoza), desde la que se observa
una impresionante cornisa rocosa entre la localidad de Cuartango y el
desvío a Orduña. Son 18 kilómetros de un bello paisaje que corresponde
a la cara este de la sierra de Guivijo. A la altura del cruce con la N-622
(Murguía-Vitoria) y A-2521 ( a Orduña) habrá que abandonar la autopista
de peaje y tomar ésta última carretera. El primer alto, tras dejar la
localidad de Belunza, hay que hacerlo en Gújuli para disfrutar de la
hermosa cascada que forma el río Aitube. No se la pierda, es una
espectacular cola de caballo de las que hay muy pocas en la península.
Para abrir boca no está nada mal la panorámica. De Gújuli habrá que
continuar hasta Orduña por el puerto de Barrerilla, de escasa altitud,
desde el que se contempla una excelente panorámica del valle.
Orduña queda cerca y merece una reposada visita. La plaza de los Fueros es el centro de la villa y entorno a ella se mueve la vida y la circulación. El palacio de Mimenza, la iglesia gótica de Santa María, el edificio de la Aduana, el colegio de los Jesuitas o el santuario de la Virgen de la Antigua, a las afueras del pueblo, son algunos de los lugares que cualquier vecino le recomendará. Resulta curiosa la situación geográfico-administrativa de la ciudad, "A siete leguas de Bilbao y siete de Vitoria", indicaban antaño los manuales, perteneciente a la provincia de Bizkaia-Vizcaya, como ya habrá advertido, pero aislada por las tierras de Araba-Alava y Castilla. Situación similar a la que presenta el condado de Treviño, cerca de Vitoria-Gasteiz, pero integrado administrativamente en la provincia de Burgos. Délica es el siguiente punto de interés en la ruta; se encuentra a la izquierda de la carretera que sube hasta el alto de Orduña y es uno de los lugares más encantadores de la Comunidad Foral. Es el mejor lugar para contemplar la bella cascada del Nervión, río que nace muy cerca del lugar. Tal como sucede con el salto de Gújuli, las primeras nieves caídas en la zona anuncian el comienzo del espectáculo. Prepare pues carretes, películas y baterías, que la ocasión lo merece. De Délica hay que volver de nuevo a Orduña y tomar la comarcal BI-2625 para ascender hasta los 900 metros que coronan el puerto. No es una excesiva altura, pero la carretera es difícil, con rampas de hasta el 14% de desnivel y con curvas continuas de 180º, de esas que obligan a girar toda la dirección y a subir permanentemente en segunda. Observe el curioso Pico del Fraile, junto al repetidor, lo encontrará al noroeste, aguja calcárea que domina todo el circo rocoso. El paseo, en cambio, no es el más indicado para los enemigos del mareo. Ya lo saben. |